La disciplina arquitectónica es de una amplia tradición y se sigue renovando. Una de sus tendencias más recientes es la arquitectura orgánica. En Wiggot te explicaremos de qué se trata. 

Este concepto hace referencia a la integración armónica de las construcciones con su compromiso con el entorno natural y social

Esta filosofía de diseño arquitectónico comenzó a desarrollarse a principios del siglo XX, teniendo como uno de sus principales exponentes a Frank Lloyd Wright.

Las bases sobre las que Wright sentó este modelo en el mundo moderno tienen como pilares las siguientes ideas: 

  • La estructura debe parecer creada por la propia naturaleza
  • Debe existir una forma predominante en toda la construcción
  • Priorizar la utilización de colores naturales
  • Revelar la naturaleza de los materiales
  • Ponderar el uso de espacios abiertos
  • Destacar las zonas para áreas verdes

Armonía entre el hombre y la naturaleza

Una característica muy peculiar de este tipo de arquitectura es que no cuenta con diseños lineales o geométricos y tampoco decoración, pues los trazos sugieren formas más naturales con la finalidad de unificar estructuras e interiores con el entorno natural.

Un ejemplo de ello es “El Oculus”, una obra del arquitecto español Santiago Calatrava. La imponente construcción se encuentra en la estación del World Trade Center, en Estados Unidos y evoca las alas de un pájaro. Fue edificada con una inversión de alrededor de 4,000 millones de dólares. La propuesta  encaja en el vacío que dejaron las Torres Gemelas y  crea una unidad con el resto de los componentes como el Museo y Memorial del 11S.

El objetivo de la arquitectura orgánica es promover la relación de las personas con la naturaleza a fin de que tiendan a prosperar en entornos naturales, como si se tratara de un jardín en donde los edificios son un elemento más que conforma el espacio.

La búsqueda de construir un ecosistema próspero pero sostenible, bajo la premisa de preservar el bienestar de la psique humana con su entorno natural y brindar un refugio a los habitantes de la zona, inspiró a más exponentes del estilo organicista como Jorn Utzon con la Casa de la Ópera de Sidney

Cada edificio orgánico es único, pues representa al lugar y los ocupantes que rodean la zona en donde se asentará, además de sus particularidades como el tiempo que tomó el diseño, así como las condiciones y cualidades del sitio.En Wiggot queremos dotarte de mayor conocimiento en arquitectura para que tanto tú como tus clientes encuentren el valor agregado en cada propiedad.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *