La infraestructura es entendida como estructuras, equipo e instalaciones de larga duración, creadas mediante ingeniería. Es uno de los aspectos que contribuye a que una ciudad, región o país se desarrolle. De este modo, la construcción de infraestructura se relaciona directamente con temas económicos y sociales, tales como, garantizar el acceso a la educación y servicios de salud, creación de medios y vías de comunicación, y protección del medio ambiente. 

Por tanto, la brecha en el desarrollo de la infraestructura se traduce en el rezago de distintos sectores. Generalmente, la infraestructura se considera un bien público, por lo cual, su construcción es responsabilidad del Estado. Sin embargo, los niveles de inversión necesarios para desarrollar la infraestructura de un país puede sobrepasar el presupuesto público y necesitar de inyección de capital privado. 

Al abordar este tema desde la perspectiva de la infraestructura hospitalaria, encontramos diversas áreas de oportunidad para el negocio inmobiliario. El 2020, año en que se declaró la pandemia por la COVID-19, fue prueba de ello, pues el rebase de las hospitalizaciones evidenció múltiples deficiencias e incapacidades del sistema hospitalario del país. 

Infraestructura hospitalaria en México 

De acuerdo con el último levantamiento del directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas que ofrece el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) sobre servicios de salud, se identificaron 2,680 hospitales generales públicos y 1,858 privados a nivel nacional; 112 laboratorios médicos y de diagnóstico del sector público principalmente integrados en los hospitales y 14 mil 733 laboratorios del sector privado. 

Por su parte, el reporte “Infraestructura en México Prioridades y deficiencias del gasto público” elaborado por el Centro de Investigación de la Sociedad Civil (CIEP) resalta que en febrero de 2020, existían 937.2  millones de Claves Únicas de Establecimientos de Salud (CLUES); de estas, 593.3 millones correspondían al sistema público; y 343.9 millones eran del sector privado. 

Las Claves Únicas de Establecimientos de Salud son una forma estándar para identificar unidades médicas en México por: estatus de operación, estrato geográfico, nivel de atención, entre otros. Estas claves consideran todos aquellos complejos creados para albergar servicios profesionales de salud, es decir, hospitales, centros de salud, laboratorios o cualquier otro edificio que brinde este tipo de servicios a la sociedad.

Si bien 2020 fue un año coyuntural que señaló claramente la falta de capacidad del sector salud en México, desde 2007 estos grandes rezagos en materia de infraestructura y equipamiento ya habían sido identificados por el Sistema Nacional de Salud (SNS). Se trata entonces tanto del rescate del sector público de salud, que incluya financiamiento para solventar las necesidades de infraestructura, así como el reforzamiento de la existente. 

La Norma Oficial Mexicana (NOM-016-SSA3-2012) indica que la Secretaría de Salud es la responsable de garantizar, a la población en general, el cumplimiento del derecho a la protección de la salud. De acuerdo con lo anterior, las características de la infraestructura física (instalaciones, mobiliario y equipamiento) de los hospitales y consultorios para la atención médica, constituyen elementos básicos para que los prestadores de servicios de atención médica de sectores público, social y privado puedan ofrecer a sus usuarios calidad, seguridad y eficiencia. 

Infraestructura médica; la oportunidad para el sector inmobiliario 

Según estos indicadores, los cambios necesarios para que el derecho a la salud sea atendido en su totalidad, recaen en una estrecha colaboración entre sectores públicos y privados para el financiamiento de la infraestructura médica. Muestra de ello, el proyecto de reconversión impulsado por Fibra Uno (FUNO). 

Durante 2020, ante la necesidad de contar con infraestructura hospitalaria en México, el Fideicomiso cambió la planeación de dos bienes inmuebles, destinados a ser usados como oficinas, dentro de la Ciudad de México y en la Zona Metropolitana, para su reconversión como centros hospitalarios. 

Un edificio ubicado en La Viga, casi esquina con Río Churubusco, en la Ciudad de México, el cual era ocupado primordialmente por oficinas de gobierno. De las dos torres que lo constituían, una de ellas fue transformada en hospital. Parte de un proyecto en desarrollo que colinda con Plaza Satélite, dentro de la Zona Metropolitana del Valle de México, donde se contemplaba un centro comercial, una torre de oficinas y otra de departamentos, debió ser modificado para hacer en su lugar un hospital.

Por otro lado, dentro del complejo de usos mixtos Mítikah, ubicado en la Ciudad de México, donde hay un hospital que no es propiedad de Fibra Uno, el fideicomiso construyó una torre de consultorios, “una mancuerna bastante exitosa”, según dijo Gonzalo Robina, director general adjunto de FUNO, a Forbes. 

El 2020, el fideicomiso era dueño de 1.3 millones de metros cuadrados de espacios de oficinas que representan aproximadamente el 18% de su flujo operativo. De ese total hasta 2022, ya ha reconvertido cerca de 100,000 metros cuadrados, es decir, casi un 10%. En conferencia de prensa, Jorge Pigeon, vicepresidente de Mercados de Capital de FUNO, explicó que la mayor parte de este tipo de transformación lo han hecho dentro de su portafolio de oficinas, donde tiene niveles de desocupación cercanos al 25%. 

Además de la insuficiencia hospitalaria, la dinámica en el portafolio de inmuebles para uso de oficinas dio un giro, gracias a las tendencias de home office que impuso la pandemia en razón de reducir el contacto social, y por consiguiente los contagios masivos. Solamente en este año, en la CDMX el número de oficinas desocupadas va en aumento, ya que, de los 10 millones 380,642 metros cuadrados disponibles, el 19.6% no está ocupado. 

Sin duda, a raíz de las nuevas dinámicas sociales y demográficas producidas por la pandemia Covid-19, el mercado inmobiliario enfrenta nuevos desafíos, pero también se encuentra ante un oasis de posibilidades. La redistribución y reconversión de la infraestructura hospitalaria es una de ellas. 

Si quieres estar al tanto de otras impresionantes propiedades e inversiones, abre tu cuenta en Wiggot. Al registrarte tienes acceso a capacitaciones y herramientas como CRM inmobiliario y oportunidades de networking para ampliar tus redes de contactos. 

No lo pienses más y forma parte hoy de la mejor comunidad de profesionales inmobiliarios en México.

Te puede interesar: WIGGOT SE UNE AL BUEN FIN 2022 CON ESTAS PROMOCIONES ¡NO TE LAS PIERDAS!