Espera, antes de alterarte respira hondo (utiliza la técnica de mi hija de 3 años, infla un globo imaginario, del color y la forma que quieras, hasta que te tranquilices).

Lo que voy a escribir a continuación no es para demeritar tu profesión ni muchos decir que cualquiera lo puede hacer (incluso vender tacos no es sencillo). Si no más bien me voy a enfocar en el porque, en cada esquina de nuestras ciudades hay puestos de tacos y la mayoría con clientela.

¡Ahh!, pero dirás, es obvio por que la dieta de la mayoría de los mexicanos incluye vitamina triple T (para los que no son mexicans, nos referimos a tacos, tortas y tamales). ¿Quién puede decir que no a un taco?, incluso el vegano/vegetariano hace de las suyas para armar sus tacos carne-free. Pero los factores que he identificado en las taquerías con relación a la venta de cualquier otro producto está sustentado en 2 pilares: sabor y atención. Mismos, que si los tropicalizamos al sector inmobiliario, se verían algo así:

A)Sabor: No importa si es un puesto de la calle, un local en forma, un restaurante de abolengo o los que hace tu mamá el domingo familiar. Lo que más vale de un taco es el cómo saben. El taco no es como la pizza o hamburguesa, donde es fácil que sepan rico. Los tacos tienen una ciencia oculta en el sazón de cada taquero, en el como arman el trompo, cuanto tiempo dejan calentado el aceite, que tipo de tortilla usan, si las salsas pican o no, si tienen limones, si hay aditamentos extras para echarle, en fin, tu amor y elección por una taquería recae en el nivel de satisfacción que dejan a tu paladar. Lo mismo es con las casas. No todas las propiedades son para todos, a algunos les gusta el tema minimalista, otros algo más contemporáneo, futurista, conservador, de época, etc. Ese mismo sabor que dejan los tacos, es el mismo que entra por los ojos del prospecto al momento de ver una propiedad desde fotografías en tu página. Y es que te pueden gustar 10/15 taquerías en la ciudad, pero de seguro tienes una a la que nunca dejarías de visitar, recomendarías y armas huelga cuando cierra para descansar. Lo mismo ocurre con tus propiedades. Si bien, a través de internet no se pueden “vivir” (y eso ya lo platicamos en lecturas pasadas, donde hoy ya debes de considerar utilizar recorridos virtuales para lograrlo), el como muestras las fotografías y videos del inmueble, es la sazón que tendrás para atraer más clientes. Y después, ya en el recorrido físico, por mejor precio, oportunidad, facilidades, etc., si la casa no está limpia, ordenada, que muestre bien los espacios, con el pasto recortado, que huela rico, etc., no le va a “saber” bien al interesado y probablemente irá a visitar otra “taquería” que encuentre más llamativa, y puede que no sea de las tuyas. Entonces no dejes que por no condimentar bien tus propiedades, tus posibles clientes intenten comer en otro lado.

B)Atencion: Aquí viene lo más bueno de visitar los lugares de este exquisito alimento. Desde el afamado güero, jefe, primo, cuñao, güerita, dama, etc., hasta el chascarro del taquero, los chistes (o albures) del mesero, la forma en que te entregan tu pedido, el como se desviven por entregarte el refresco. He visitado taquerías en las que es un show como corta el trompo el sensei detrás del carrito, y en otros que se la pasan bailando mientras surten los tacos. ¿qué taquería conoces, que los tacos están OK (ni fu ni fa), pero por el simple hecho del como te atienden y te hacen sentir, sigues visitándolos?

Puedes tener el mejor producto, pero si tu actitud es negativa, no haces click con el prospecto, etc., no te van a comprar nada.

Puedes tener una actitud hiper positiva (y un producto promedio), transmites el sentimiento de servirle a la gente y que lo quieres ayudar, risas y amistades pueden surgir de esa primera presentación, entonces si vas a vender.

Mejor aún si tienes un producto y una actitud por encima de las expectativas del cliente. Formarías parte de esos vendedores fuera de serie.

Y es que es una realidad: nadie quiere que les vendan algo, pero están dispuestos a comprar si los tratas como ellos esperan ser tratados.

Cuando alguien entra a una taquería o agenda una cita para ver una propiedad, es un hecho que lo que busca es consumir (dudo mucho que haya gente que visite un puesto de tacos nomás para ver que vende, o pierda su tiempo en estar viendo propiedades solo para saber como se ven por dentro). Ya lo tienes ahí, no dejes que se caiga esa venta. El está buscando adquirir una propiedad, tú la tienes. La chamba no está en mostrar la propiedad (para eso lo pueden hacer ellos solos), tu trabajo recae en todo lo demás fuera de la propiedad. El brindar seguridad, confianza, hacerlo sentir que contigo no va a tirar su dinero, no se va a meter en broncas, que estarás ahí aun cuando ya haya comprado la propiedad, que lo puedes ayudar también a hacer negocios (pregúntale en que trabaja y contáctalo), en fin, integrarlo a tu círculo de amistades y que sepa que un amigo es el que le va a vender la propiedad.

Atención y sabor, muy por encima de ubicación, precio, etc. No te limites a solo subir un anuncio, generar una cita con ellos, mostrar la propiedad y tratar de sacar la tarjeta de tu prospecto. Hay muchos tiburones allá afuera que se desviven por los clientes. Si no los tratas bien, se los van llevar y tú, tendrás que reconfortarte con unos tacos al pastor para el coraje.

Nos leemos luego

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