Imagina esto

Estas en clase (regresemos a kínder o primaria) y la maestra pone una actividad en la que tienes que armar un rompecabezas, digamos de 1,000 piezas. Tienes x tiempo para hacerlo y la única persona que sabe como se ve el rompecabezas armado es la maestra. En el transcurso de la actividad ves piezas que se parecen y medio embonan, pero sabes que no van a ahí, al mismo tiempo de que se te puede extraviar una que otra parte. Al final, logras armarlo como Dios te da a entender y se lo muestras a la maestra. Ella lo compara con la imagen que tiene, y aunque tu lo ves igual (o parecido por lo menos), te dice que esta mal.

Esto es lo que sucede hoy en los negocios y operaciones todos los días. Aunque tu te dediques a reunir la información necesaria para algún trámite, hay una autoridad absoluta que es la que define si está bien o mal lo que hiciste. Y en la aventura de lograrlo, pueden ocurrir muchos errores que al final te pueden retrasar y de plano no lograr tu objetivo. No se diga cuando alguien te roba alguna “pieza” o te la intercambia por alguna parecida pero que al final no es la correcta.

Imaginemos el mismo ejemplo del rompecabezas, pero ahora del punto de vista de lo que es Blockchain.

La maestra en este caso ya no sería necesaria, debido a que el rompecabezas no lo armaras solo tu, sino con todos tus compañeros del salón. A cada uno se le dio una imagen final de como se ve el rompecabezas y cada uno cuenta con cierto número de piezas para armarlo. De esta forma, todos saben como se ve el producto final, cada quien sabe donde van sus piezas, pero también saben donde van las tuyas y las de otros compañeros para que embonen con las de ellos. Si alguno quiere cambiar o perder alguna pieza, todos se enterarían quien fue el culpable porque al final, ese grupo de piezas tienen un dueño y alteran el producto final.

Esto es Blockchain: es un registro de transacciones seguras que se encuentran distribuidas entre los integrantes de una misma red. Cada operación se queda grabada permanentemente para todos los usuarios, de tal forma que ningún movimiento permanece oculto. Dicho de otra forma, Blockchain es una tecnología que le permite a un grupo de desconocidos confiar entre ellos por medio de un registro compartido por todos los usuarios.

Blockchain es sumamente útil para las operaciones financieras, debido a la seguridad que ofrece a las empresas, es una alternativa segura y digital para los procesos bancarios típicamente burocráticos que consumen demasiado tiempo y recursos.

Pero Blockchain no solo es útil para el área financiera. Se puede usar para todo lo que necesite de toneladas de información y transacciones, y que se requieran que todas las partes sean confiables y seguras. Es por esto que esta tecnología está revolucionando la manera en la que intercambiamos valores a través de internet. Blockchain va a cambiar la forma en la que se hacen operaciones inmobiliarias en el mundo, y esto hará que tu negocio crezca a pasos agigantados.

Desde que me involucre en el segmento de bienes raíces siempre he hecho la misma pregunta ¿por qué no puedes comprar una casa de la misma manera en la que compras una chamarra por internet? Y la respuesta siempre ha sido la misma: Tramites, créditos y papeleo. Y es que en la era en la que contestar un mensaje de WhatsApp 5 minutos después, dar like a una foto en Facebook 2 días posteriores o recibir una entrega por correo de una computadora que pediste a Los Angeles 2 semanas después es DEMASIADO tiempo, ¿cómo es posible que el comprar una propiedad tome meses para lograrlo?

Aquí es donde Blockchain nos va a ayudar a revolucionar el segmento inmobiliario. Con esta tecnología, no solo brindarás más confianza a tus clientes, sino que también te ahorraras tiempo, harás entregas más confiables y seguras, y lo mejor de todo: tendrás tus comisiones más rápido.

Si bien hay muchos aspectos que por las leyes en nuestro país aún no permiten la totalidad del uso de Blockchain, no está lejos de que se logre.

Solo cierra tus ojos y visualiza esto:

Una pareja se mete a un buscador (o tu misma página) a buscar una propiedad. Encuentran la que quieren. Vieron ya el recorrido virtual y les gustó. Dan click en el botón COMPRAR y automáticamente se genera toda la información necesaria en estos bloques para efectuar la compra venta. ¡Ah! Me faltó aclarar, es domingo a las 11:30 de la noche. El lunes tu te levantas con una venta hecha.

Así de sencillo será comprar una propiedad en un futuro nada lejano.

Nos leemos luego