Entre los primeros problemas a los que se enfrenta un agente inmobiliario, es el estado de la propiedad que se intenta vender, puesto que de esto depende el valor final que se pueda obtener de la venta.
En programas de televisión se han hecho famosos agentes que se dedican a comprar propiedades para renovarlas y venderlas a un mayor costo, lo que suena muy atractivo, pero se necesitan considerar varios factores para poder dedicarse a ello.
Sin embargo, tan solo el poder hacer ciertos arreglos, sin una renovación total como vemos en la televisión, puede ser la clave del éxito.
Estos son los pasos que debes hacer.
PLANIFICACIÓN Y PRESUPUESTO:
Antes de comenzar cualquier renovación, haz una planificación detallada de lo que deseas lograr. Establece un presupuesto realista que incluya los costos de materiales, mano de obra, permisos y cualquier gasto adicional que pueda surgir.
PRIORIDADES:
Identifica las áreas o elementos de la propiedad que necesita renovación urgente y dales prioridad. Concentra tus esfuerzos en mejorar aquellos aspectos que afecten la funcionalidad y seguridad del lugar.
INVESTIGACIÓN:
Investiga diferentes estilos, diseños y materiales para inspirarte y tomar decisiones informadas. Busca ideas en revistas, sitios web de diseño y redes sociales para obtener una visión clara de lo que deseas lograr.
CONTRATAR PROFESIONALES:
Si los proyectos son complejos o requieren habilidades especializadas, considera contratar a profesionales calificados, como contratistas, arquitectos o diseñadores de interiores. Su experiencia puede marcar la diferencia en el resultado final.
HAZLO TÚ MISMO (DIY):
Si tienes habilidades en trabajos manuales, hay proyectos más pequeños que puedes hacer tú mismo para ahorrar dinero. Sin embargo, asegúrate de conocer tus limitaciones y no te excedas en tareas que puedan ser peligrosas o requieran conocimientos avanzados.
SEGURIDAD:
La seguridad debe ser una prioridad en cualquier proyecto de arreglos del hogar. Asegúrate de seguir las normas de seguridad y utilizar el equipo de protección adecuado al manipular herramientas y materiales.
CALIDAD DE LOS MATERIALES:
Opta por materiales de buena calidad, especialmente para elementos estructurales y renovaciones que tendrán un impacto duradero en la propiedad.
La calidad garantizará la durabilidad y reducirá la necesidad de reparaciones frecuentes.
ESPACIOS ABIERTOS Y LUMINOSOS:
Si es posible, considera la posibilidad de crear espacios abiertos y luminosos. Estos ambientes tienden a ser más atractivos y funcionales, además de proporcionar una sensación de amplitud.
EFICIENCIA ENERGÉTICA:
Considera incorporar características y materiales que mejoren la eficiencia energética de la propiedad, como ventanas con doble acristalamiento, aislamiento adecuado y electrodomésticos energéticamente eficientes.
MANTÉN EL ESTILO DE LA PROPIEDAD:
Trata de mantener el estilo arquitectónico original de la propiedad en la medida de lo posible. La coherencia entre el diseño y la estructura puede aumentar el atractivo y el valor de la propiedad.
MEDIO AMBIENTE:
Siempre que sea posible, elige opciones ecológicas y sostenibles para los arreglos. Esto puede incluir el uso de materiales reciclados o energías renovables, por ejemplo.
MANTENIMIENTO FUTURO:
Antes de realizar un arreglo, considera si requerirá algún mantenimiento adicional en el futuro. Opta por soluciones que sean de bajo mantenimiento para facilitar el cuidado a largo plazo.
FINALIZACIÓN A TIEMPO:
Establece un cronograma realista y trabaja para completar la renovación a tiempo. Los retrasos pueden aumentar los costos y prolongar innecesariamente el tiempo que la propiedad está fuera de uso.
CONSIDERA EL MERCADO
Si estás renovando para vender la propiedad, es necesario tener en cuenta las preferencias y necesidades del mercado objetivo. Las renovaciones que agregan valor y atractivo para los compradores potenciales pueden ser más rentables.
Recuerda que la renovación de una propiedad requiere paciencia y planificación cuidadosa. Este es otro factor a tomar en cuenta: el tiempo que se cuenta para vender la propiedad. Las circunstancias son distintas en cada caso, zona y cliente. Un inmueble listo para mostrarse puede tomar de 8 meses a un año para venderse dependiendo del mercado y las circunstancias económicas. Así que ese tiempo debe sumarse al cronograma y la planificación de los objetivos a cumplir.
Todos estos datos deben tenerse a la vista y archivarse de forma ordenada, de tal manera que nos de una radiografía de los pasos a tomar. Para esto se cuenta con las herramientas que Wiggot ofrece. Contáctanos y conoce cómo puedes realizar tu trabajo de forma fácil, sencilla y efectiva.
¡A renovar se ha dicho!