Como profesional inmobiliario es muy importante que te mantengas en una capacitación y actualización constante para ofrecer el mejor de los servicios a los clientes que están en búsqueda de adquirir una propiedad.
En algunos países los agentes requieren una licencia para prepararse y trabajar como profesionales en el sector. Sin embargo, en nuestro país no existe una certificación absoluta y oficial para especializarse con excepción de los estados de Quintana Roo, Tamaulipas y Baja California.
A pesar de eso, distintas asociaciones como la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) que están en busca de que exista una guía para que los asesores de bienes raíces se desempeñen de manera correcta en un futuro no muy lejano.
Es por ello que la AMPI, en conjunto con el Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales de la Secretaría de Educación Pública, ofrecen los certificados de comercialización de bienes inmuebles, la certificación en administración de bienes inmuebles en condominio, en administración de bienes inmuebles mini bodegas para arrendamiento y en comercialización de inmuebles turísticos.
Asimismo, con el objetivo de ofrecer una mayor profesionalización, dar certeza jurídica a las personas que contratan los servicios de los agentes y mantener un registro de los asesores inmobiliarios que existen en el país, la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México, aprobó la Ley de Prestación de Servicios Inmobiliarios.
Y es la Secretaría de Desarrollo Económico la institución encargada del registro y acreditación de los profesionales en el sector de bienes raíces en la capital del país. La Secretaría podrá emitir dos tipos de Certificados: la de administrador inmobiliario o la de corredor inmobiliario.
Todo depende de cada agente que establezca en su solicitud el tipo de certificación que desea obtener. Para conseguir una o las dos (si así lo desea) deberá presentar y aprobar ambos exámenes; así como demostrar que serán aptos para el buen desempeño de sus funciones con un documento emitido por alguna institución educativa o asociación acreditada en la materia.
Para las personas físicas, los requisitos que deben presentar son: copia de identificación oficial vigente con fotografía, aceptar expresamente cumplir con los programas de capacitación y actualización y finalmente acreditar su experiencia y conocimientos en servicios de bienes raíces con una certificación emitida por una autoridad competente.
En el caso de personas morales los requisitos son los siguientes: una copia certificada del documento constitutivo o de creación de la sociedad, copia de identificación oficial vigente con fotografía del representante legal, aceptar expresamente que los profesionales que la componen, socios o empleados, cumplirán con los programas de capacitación y actualización que señala la Ley y acreditar su Registro ante las autoridades fiscales correspondientes.
Entre las ventajas de las certificaciones, el agente inmobiliario podrá llevar a cabo un acompañamiento más integral con sus clientes, será una mejor guía en cuestiones legales, ofrecerá los mejores consejos y ofertas que se ajusten al presupuesto y requerimientos del comprador y su desempeño mejorará significativamente.