“Los remates bancarios en México aumentaron hasta un 30% desde que inició la pandemia del Covid-19”, informó Fernando Rodríguez Ávalos, abogado que se encarga de operaciones con Santander y Scotiabank en Expansión.
Esta venta organizada de la propiedad pudo darse, debido a que las personas que obtuvieron un crédito hipotecario ya no pueden pagarlo. Y es por eso que la institución bancaria, por ley, puede reclamar el inmueble, ponerlo en remate, y así poder recuperar la deuda.
Cabe señalar que las propiedades al ser subastadas, pueden disminuir su precio hasta un 60% del valor real dentro mercado, además de conservar o aumentar su plusvalía.
La vivienda, al tener un precio accesible, es de gran ventaja para los inversionistas, ya que se dedican a remodelarla para después venderla.
Tipos de remates bancarios en México
Litigiosos: En este tipo de remates se compra el crédito que existe a favor del banco, la garantía de la hipoteca y el juicio que se ventila en contra del deudor, es decir, no se compra la propiedad.
Estas operaciones se realizan ante un notario público o en juzgado. Hay que aclarar que en este proceso se deben cubrir los gastos del litigio.
Así como el de los abogados y notarios que participen, sin olvidar las deudas pendientes de los servicios.
Adjudicados: A diferencia de la anterior, aquí la propiedad ya ha sido liberada de todo juicio, por lo que facilita su compra y posesión.
Adicionalmente, existe el remate judicial, el cual es a través de un juzgado por medio de una puja, aquellos interesados compiten entre ellos para poder adquirirla en efectivo.
Para ser partícipe de este tipo de venta organizada, se debe depositar el 10% del valor de la propiedad el día de la subasta en el juzgado.
Situaciones a considerar cuando se adquiere una vivienda en remate bancario
Como en toda compra e inversión hay situaciones que se deben considerar:
- No es posible visitar el inmueble, esto debido a que posiblemente se encuentre habitado por los deudores.
- Los gastos extras se absorberán en el remate, es decir, se adquiere la deuda de los servicios (agua, luz y predial).
- Hay que pagar el avalúo de la propiedad.
- Cubrir con los honorarios del notario público y ahogados que contraten para el juicio.
- No se puede pagar la propiedad en remate bancario con un crédito hipotecario.
- Contratar un abogado para proceder a un desalojo, si es que los deudores todavía no han desocupado la vivienda.
Es importante contar con la asesoría de abogados y notarios para comprar una vivienda a través de un remate bancario, con el fin de no caer en un fraude inmobiliario.
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